¿Qué es la forma de pago 28 del SAT?

Para ir directo al grano y sin rodeos burocráticos: la forma de pago 28 es la clave numérica oficial que el SAT asignó exclusivamente para identificar transacciones liquidadas con tarjeta de débito. Este dato es un requisito obligatorio establecido en el Anexo 20 para la correcta emisión de cualquier CFDI 4.0 en México.

Es fundamental entender que esta clave diferencia el dinero propio del crédito. Cuando usas la clave 28 SAT, le estás diciendo a la autoridad que el pago salió directamente de los fondos disponibles en una cuenta bancaria del cliente, a diferencia del efectivo o las tarjetas de crédito donde el flujo de dinero es distinto. Si en tu factura no aparece este número y pagaste con tu tarjeta de nómina o ahorros, podrías tener problemas de trazabilidad fiscal. Es un dato pequeño, pero indispensable para que el catálogo de formas de pago cuadre con tus estados de cuenta.

Principales claves del catálogo de formas de pago

El SAT es muy estricto con la clasificación del dinero y, seamos honestos, a veces es fácil confundirse con tantos números. Seleccionar la clave incorrecta es uno de los errores más comunes al pedir factura en un restaurante o pagar servicios. Para que no te pase, aquí tienes una guía rápida que te ayudará a distinguir la clave 28 de las otras opciones más usadas.

Entender esto te evita dolores de cabeza en la fiscalización:

¿Cuándo se debe usar la clave 28?

Saber exactamente en qué escenarios aplica esta clave te ahorrará muchas reexpediciones de facturas. Básicamente, la debes solicitar cada vez que uses dinero electrónico que ya es tuyo y está disponible en tu cuenta. Es vital para validar gastos ante la autoridad y mantener todo transparente.

Asegúrate de que aparezca la clave 28 en estas situaciones:

• Pagos físicos en terminal punto de venta (TPV) cuando insertas o acercas tu tarjeta de débito.
• Compras en comercio electrónico donde ingresas los 16 dígitos de tu tarjeta de débito para que se haga el cargo a cuenta directo.
• Pagos a través de apps digitales (como Uber, Rappi o servicios de streaming) que están vinculadas directamente al saldo de tu tarjeta de débito, clasificándose como pagos digitales inmediatos.

Diferencia entre forma de pago y método de pago

Aquí es donde medio México se confunde, pero la diferencia es sencilla si lo ves de forma práctica. La "Forma de Pago" responde a la pregunta "¿Con qué instrumento pagaste?" (aquí es donde entra la tarjeta de débito o clave 28), mientras que el "Método de Pago" responde al "¿Cuándo se liquida la operación?". No son lo mismo y mezclarlos es peligroso.

Por regla general, si utilizas la clave 28, la operación se liquida al instante en la terminal o en la web. Esto casi siempre te obliga a seleccionar PUE Pago en Una sola Exhibición como método de pago. Es muy raro ver una tarjeta de débito asociada a un pago diferido (PPD Pago en Parcialidades), ya que la naturaleza del débito es el cobro inmediato. Combinar correctamente el momento de la transacción con el instrumento bancario es lo que te mantiene en cumplimiento con las reglas del SAT.

Beneficios fiscales y deducciones personales

Usar la clave correcta no es solo un capricho administrativo, es dinero que regresa a tu bolsa. Para que el SAT acepte tus deducciones personales en la declaración anual y puedas obtener saldo a favor, es obligatorio que ciertos gastos estén respaldados por medios electrónicos y perfectamente identificados. Si pagas con tarjeta pero te facturan por error como "01 Efectivo", esa deducción probablemente sea rechazada automáticamente.

Revisa esta tabla para asegurar tus devoluciones:

Errores comunes al facturar con tarjeta de débito

A veces, por las prisas en la caja o porque el sistema del comercio es confuso, terminamos con una factura que no sirve. El error más frecuente es confundir la clave 28 (débito) con la clave 04 (crédito). Aunque para ti sea "solo un plástico", para el SAT son dos universos distintos: uno es tu dinero y el otro es dinero del banco.

Evita a toda costa estas fallas que generan discrepancia fiscal:

• Seleccionar "04 Tarjeta de Crédito" cuando pagaste con débito; esto descuadra tus reportes ante el banco y el SAT.
• Permitir que pongan "01 Efectivo" en gastos deducibles como médicos o gasolina, lo que anula tu beneficio fiscal.
• Usar "99 Por definir" en una operación que ya pagaste en ese momento; eso es motivo inmediato para multas SAT o cancelación de factura.
• No verificar la factura al momento y tener que solicitar una reexpedición de CFDI días después, complicando tu cierre de mes.

Validación y conciliación bancaria

Para los contadores y los dueños de negocio que buscan eficiencia, la clave 28 es una bendición en la contabilidad electrónica. Su uso correcto permite una conciliación bancaria casi automática. Imagina que tu software detecta un cargo de $500 en el banco y encuentra una factura por $500 con la clave 28; el sistema hace "match" al instante.

Esto simplifica enormemente el rastreo de operaciones y la auditoría electrónica interna. Al coincidir el movimiento del estado de cuenta con el dato en el CFDI, validas el flujo de efectivo rápidamente y te blindas ante cualquier revisión de la autoridad, demostrando que cada peso que salió de la cuenta tiene su soporte fiscal correcto.

Preguntas frecuentes sobre pagos con tarjeta

Es normal que surjan dudas específicas cuando ya estás frente al portal del SAT o revisando tus tickets del mes. Una pregunta clásica es: ¿Qué pasa si puse 04 en vez de 28 por error? La solución es simple pero tediosa: debes cancelar esa factura y hacer una sustitución de CFDI relacionando el folio anterior. No lo dejes pasar, porque la corrección de facturas a tiempo te evita multas.

Otra confusión habitual es sobre las tarjetas de vales o monedero electrónico. ¿Se usa la 28? No, para eso existe la clave específica 05. Y finalmente, ¿puedo usar clave 28 con PPD? Técnicamente es posible si pagas una parcialidad diferida usando tu tarjeta de débito días después de la compra, pero es un caso atípico. Ante cualquier duda extra, recuerda que las consultas fiscales preventivas siempre son más baratas que corregir errores del pasado.